Cuando eres un niño de corta edad una larga escalera es un desafío que permite demostrar que no eres tan pequeño. Cuando eres un anciano de avanzada edad una larga escalera es un desafío que permite demostrar que no estás tan viejo.
Parece que solo a los adultos nos incomodan los desafíos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario