Aquel asiento a su lado data de principios del siglo pasado, época en donde se inauguro el mítico bar La Playa en el puerto de Valparaíso. Durante la década del ’50 no era extraño ver a Pablo Neruda sentado allí, incluso el mito popular señala que en un rincón de la barra estuvo escrito el borrador de uno de sus más célebres sonetos hasta que alguien decidió hacer un retoque en el barniz. Algunos de los principales exponentes de la cultura criolla iniciaron o terminaron allí una agitada noche de bohemia porteña y no son pocos los óleos de Gonzalo Ilabaca concebidos mientras degustaba alguna copa de vino en el lugar.
A ella no le importa nada de lo anterior, tan solo espera que en aquel asiento se vuelva a sentar aquel amable hombre que le invito aquel burbujeante trago aquella noche inolvidable.
sábado, 5 de marzo de 2011
En la Barra del Playa
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4 comentarios:
Hola Luis,... en la barra está la sopresa, lo que te sorprende, o quien te sorprende....
La vida tiene eso....
esperando quien nos sorprenda.. sea Neruda... o tú, con tus imágenes que son verdadero arte.....;-)
que tengas una bella semana!
Ali
seguramente un lugar con magia, y ella sin saberlo está siendo presa de ella, en este caso burbujas en verso y un decidor, un abrazo
Es bonito saber que en los sitios donde estás hay leyendas... ¡y qué leyendas!
Besicos
Porque por mucha historia que tenga un lugar, la importante, es nuestra historia cotidiana.
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